20 octubre, 2009
Tiempo para vivir
Es la una por la noche (o por la mañana depende en tu punto de vista) y nosotros solo empezamos a marchar a fiestas. En los Estados Unidos, las fiestas terminan a la una, ¡no empiezan! Estamos en un mundo de tiempo completamente diferente y a mi me encanta este mundo nuevo.
Entramos en un bar se llama Manía y estamos la única gente en el bar. ¡Pero ya es la una y media! ¿Dónde están las otras personas? Pues, nos damos igual y pedimos para unas cervezas frías y por supuesto baratas. El bar es muy oscuro con muchas luces de colores diferentes que cambian cada segundo. La música de tecno está tan ruido que nosotros no podemos oír nuestras conversaciones. Podemos sentir la pulsa de cada canción en nuestros cuerpos y por eso empezamos a bailar sin pensar; estamos uno con la canción y el bar.
Con la distracción de nuestras canciones favoritas (y americanas) no nos damos cuenta de que el bar esta llena de gente. Hay gente de todos edades. Hay un hombre con un estomago grande y pelo gris, quien huele muy mal de sudo, y quien está sentando cerca de un grupo de chicas morenas, guapas y jóvenes. Cerca de yo, hay un chico moreno y pequeño, quien parece bastante joven para beber. En la finca hay una mujer de casi cuarenta años. Ella está borracha y cantando a una canción de David Bisbal y no sabe que otras personas están mirándola. Yo miro a todas de estas personas con ojos grandes y pienso a mi mismo ‘que bueno’. En general, la mayoridad de la gente son de nuestra edad, pero hay una mezcla muy grande. Aquí en España no hay edad ni tipo de persona para ir de fiesta.
Mis pensamientos sobre la gente en Manía están interrumpidos con las luces brillas que significan que el bar va a cerrar. ¡También significa que ya son las cuatro por la mañana! Esto nunca ocurre en los Estados Unidos, pero no significa nada malo sobre la gente de aquí. En España, el bar es más que un lugar para emborracharse. Es un lugar para conocer a gente nueva y divertirse con amigos viejos; es un lugar para bailar, cantar, reír y hablar. En España, no hay tiempo para dormir pero hay mucho tiempo para vivir.
Posted by kebart11 a las 5:38 p. m. // // //
